martes, enero 31, 2006

Muerto el perro ... o a perro flaco

... se acabó la rabia.

Acabados los exámenes, la uveitis a remitido. Ahora lo tengo prácticamente desinflamado. Ya estoy quitándome las gotas.

... todo son pulgas.

Aunque este frio invernal ha acabado trayéndome una vieja colega de visita. Tengo desde hace un par de días la "sensación collarín" esta que te da cuando la bicha muerde en las vertebras del cuello. Para mirar a los lados: hacerlo despacito. Porque cuando se te olvida muerde como una bestia. He estado probando calor, ejercicios, automasajes ... pero no es suficiente. Habrá que buscar una pequeña pastillita de la suerte. A ver si encuentro alguna, que hace ya mucho que no las uso.

De lo malo, la semana que viene toca dosis. Pero anula la idea que tenía de aumentar los plazos entre dosis, claro. Por lo menos de momento.

P.D.) Me han dado una nota. 5.0 en Proyectos. ¿Justito? uhm .... ¿optimizado? ;)
A ver si salen las otras dos, que seguro que de rebote el cuello se vuelve de goma otra vez.

martes, enero 17, 2006

Me estoy estresssaaaaaando

Jejeje. Vengo de ver a mi médico preferido, os voy a poner al día un poco.

Ayer por la mañana, unas horas antes de mi primer examen (era a las 16:00) a pesar de que a indicación de Txema, que fuí a verlo el viernes, me estaba sulfatando el ojo a base de bien, se me nubló la vista del ojo izquierdo. ¿Cómo cuando los gafotas entramos a un bar en invierno? Pues igual, pero sólo el derecho. Dejé de chapar, del susto, y me tiré en la cama. No mejoró mucho hasta después del examen. Creo que me vino bien, porque se me pasó el acojone del examen, dado que el acojone por el ojo era mucho mayor. No hay mal que por bien no venga.

Hoy, la misma historia. Txema me había "citado" para el Viernes, pero como esto es un poco grave, me he ido a verle hoy. Con tanta suerte que, a pesar de ser uno de sus días de quirófano, ha coincidido mi visita con uno de sus descansos y le he pillado en la planta de Oftalmología. Justo cuando estaba hablando con unos de los médicos que andaba por allí, que me estaba mandando a urgencias a por el papelote de rigor, ha aparecido él. Nada, todo de rodado. Pa' dentro:
  • ¿Que tal estás? ¿que ha pasado?
  • Pues que me estoy echando las gotas y se me ha nublado el ojo derecho...
  • ¡¡¿¿El derecho?!!
  • No hostia, me he confundido. El izquierdo, perdona.
  • Ah vale, sientaté que te miro. ¿que tal estás?
Mira el fondo de ojo. Inflamado. Eso se ve por fuera, lo tengo muy irritado, pero los profesionales usan su maquinaria específica. Mira la presión, está bien. Me ha pinchado trigón a ver si lo paramos un poco. Lo cojonudo es que me ha preguntado a mí. Este tío es la leche. No os haceis a la idea de lo gratificante que me resulta que comente los tratamientos de esta forma conmigo.
  • Tienes la presión bien, podría ponerte trigón ¿que hacemos? ¿te pincho? - Txema, dudando
  • Pues no sé. Yo he venido a eso por si acaso, pero Tú eres el profesional. A mi pregúntame de Medio Ambiente o Proyectos que es lo que estoy estudiando ahora :P
  • No, como quieras ... - Con la ampolla de trigón en las manos
  • Coño, él que sabe eres tú. Sabes que me fio de tí. Para eso he venido a verte.
Duda unos segundos ...
  • Venga te pincho.
  • Espera. Acabo los exámenes el Sábado. Yo creo que según acabe se me pasará. Nos la podemos jugar, si ves que tal - Son coorticoides fuertes, no me hace mucha gracia meterme eso si puedo evitarlo.
  • Tampoco hay diferencia entre hacerlo que no, así que mejor te pincho y eso que ganamos.
  • Bueno, venga
Rompe la ampolla. Monta la jeringuilla. La carga. Vamos allá
  • A ver, miramé a mi .... Ya está .... Pincho bien ¿Eh? :P
También me ha dicho que los ansiolíticos seguramente no me ayuden, porque es stress nosequé. Vamos que no es una depresión, ya que no estoy desanimado ni nada.Es la mala sangre que me ponen estas épocas de presión total. Yo aparentemente estoy tanquilo, bastante animado. Mis posibilidades son reales, seguramente apruebe. Pero los nervios ante un examen son normales, forma parte del examen en sí. Supongo que mis esfuerzos por controlar la mente no engañan a mi cuerpo por dentro. Le he comentado lo de los comprimidos de Melissa y Valeriana, y le ha parecido bien. A ver si las saco de un jodía vez, me que van a costar un disgusto ocular al final.

¿Los exámenes? Pues ya he empezado. Ayer entregué uno, mañana otro, y el sábado el último. Abstenerse los curiosos, porque no voy a decir nada de como me han salido hasta que no tenga los resultados. Que se gafan. Entregaré todos esta vez. Y espero que me pongan más de un 5.0, aunque un 4.98 también me vale, como comprobé en septiembre :P.

Mientras he escrito esto, la niebla se ha levantado. No me extraña, menuda chapa he metido.
Sí, hemos decidido la opción buena, parece. Chema es un jodido crack, claro que con mi inestimable ayuda lo tiene chupado. En serio. Admiro a este tipo.

martes, enero 10, 2006

Una vez más, fiel a su cita

¡Cómo no! ¿Qué son unos examenes sin uveitis? Chuminadas. Lo suyo es tener un ojo bien inflamado, que así todo se ve de otra manera.

Pues eso, que aquí estoy de nuevo con mis pinchacitos de rigor. Pero no de Infliximab, de los que me dan al mirar algo de cerca, al mirar directamente a la luz, cuando me toco el ojo en la parte inflamada (es anterior, no es que esté haciendo ninguna locura) Los médicos lo llaman uveitis anterior. Yo ya ni lo llamo, no hace falta, viene sin que lo haga.

Voy a bajar a la farmacia a pillar los colirios, y de paso unos tranquilmacines. ¿Qué igual me estoy pasando? Pues igual, pero antes de que la tensión acabe con mis esfuerzos de estos días/meses, lo mejor será que me drogue como dios manda. A ver si encima de tener el ojo "como un tomate" voy a tener problemas con los exámenes. No voy a volver a pasar por lo que sufrí en septiembre. Sí, sí, es que estoy un poco nervioso. ¿Que si no me lo sé? No me tomes el pelo, hombre. Que es la tercera vez que me presento en 6 meses a los mismos exámenes. Pero hay cosas del corazón que la razón no puede entender ...

He ido a preguntarle a Chema esta mañana, pero no estaba. Lunes y martes quirófano, no me acordé. Ya se me pasó la idea por la cabeza en Navidades, que tuve un ataquillo de ansiedad. Llamé a los del Infliximab, para ver si podía mezclar las benzodiacepinas con mi cóctel de Infliximab e Imurel y me dieron el ok. La vorágine de la tienda de mi madre, que me alejó de los estudios, lo que alejó también la ansiedad. Pero el regreso a la normalidad, pese a que en un principio fue libiano, cada vez es más duro. Como el anillo único cuando Mordor estaba cada vez más cerca, el peso de la realidad me oprime el pecho cada vez más. Así que, de momento, voy a automedicarme, que está muy feo, pero llega un momento en que darte una vuelta a ver al ambulatorio sólo te sirve para ahorrarte unos duros, así que ya me los ahorraré mañana. El tiempo ante un brote de uveitis es importante.

Como dice aquél, yo es que me cago en todo, pero me cago en todo con amor.

Por lo menos ya me quito los mocos muchas veces menos que antes, lo que se agradece.

[Una hora después]
Increible paseo por las calles de Valladolid. Resulta que sin receta médica ahora no me dan los colirios. Parece que se acerca la inspección, porque es la primera vez en mis años de uveítico que tengo estos problemas para conseguir los colorios.
Sudores sacarle las recetas al médico de urgencias, el único disponible. No voy a expandirme en esto. Pero si os voy a contar que como no estaba el horno para bollos, he salido con las recetas justas. Así que me he venido con unas pastillas de extracto de Melissa y Valeriana para mis nervios. A ver si va tan bien como la química ... por lo menos seguro que es menos adictivo.